El Gin Tonic con infusión y un Dry Martini muy especial son sólo algunas de las exquisiteces que podemos encontrar en La Fragua cafe-bar de Cercedilla. Un bar que es, desde luego inclasificable.

Un bar que se reinventa a sí mismo constantemente y que es fiel reflejo de su creador, Sergio.

Sergio, que llenaba el bar de bicicletas colgadas cuando se celebraba el «Test the best».

Sergio, que en el 2012, cuando terminaba el calendario Maya,  hizo la «Fiesta del fin del mundo» y ahí estuvimos, dándolo todo hasta las tantas de la madrugada con el lema «que el fin del mundo te pille bailando».

Sergio es una de las principales atracciones de los carnavales del pueblo, habiéndose disfrazado de Torrente, del primer paracaidista espacial o, el año pasado de Donald Trump, con su mítico «Make Cercedilla great again». Nos desviamos expresamente para verle y, como siempre, no defraudó.

Sergio, que viaja a los lugares más reconditos del planeta para nutrir su mente inquieta de nuevas experiencias inspiradoras.

Que tiene extraordinarias ideas, no sólo para su bar, sino también para el pueblo en general y para la asociación de comerciantes en particular.

¡Paz y amor… y el plus p´al salón… feliz 2018! Es la dedicatoria que ha realizado desde su Facebook.

Desde la asociación de comerciantes y empresarios de Cercedilla AEGA también queremos desear un muy feliz año a todos y todas las Cercedillenses y, en este caso, desearle un feliz año también a la Fragua.

A ver que nuevas ideas te traes desde Corea del Norte y a ver con qué nos sorprendes en estos carnavales que están ya, cómo quien dice, casi casi a la vuelta de la esquina.